Costa de Marfil

En Costa de Marfil, el 26% de las niñas se casan o se unen en pareja antes de los 18 años, y el 7% antes de los 15 años.

En Costa de Marfil, el 2% de los chicos se casa antes de los 18 años.

El matrimonio infantil es más frecuente en el Norte (donde el 52% de las mujeres de 20 a 49 años se casaron antes de cumplir los 18) y el Noroeste(48%), y entre los grupos étnicos Gur y Autre Ivoirien.

El matrimonio infantil puede estar más extendido de lo que indican las estimaciones actuales. En Costa de Marfil sólo se registran la mitad de los nacimientos, lo que dificulta determinar la edad exacta de millones de niñas.

El matrimonio infantil está impulsado por la desigualdad de género y la creencia de que las mujeres y las niñas son de algún modo inferiores a los hombres y los niños.

En Costa de Marfil, el matrimonio infantil también está impulsado por:

● Pobreza: El 50% de las mujeres de los hogares más pobres de Costa de Marfil se casaron siendo niñas, frente a sólo el 14% en los hogares más ricos. El matrimonio infantil se utiliza a menudo como táctica de supervivencia, especialmente cuando las familias no pueden permitirse enviar a las niñas a la escuela. Al parecer, algunas niñas se prostituyen para poder pagar su educación.

● Nivel de educación: El 43% de las mujeres sin estudios se casaron antes de los 18 años, frente a sólo el 12% que habían completado la educación secundaria o superior. Hay relativamente pocas escuelas secundarias en Costa de Marfil y muchas niñas tienen que alojarse en pensiones o encontrar alojamiento temporal para poder asistir. Esto las hace vulnerables a la violencia sexual y al matrimonio con los agresores.

● Normas culturales: Los líderes comunitarios y religiosos han promovido históricamente el matrimonio infantil. Muchas comunidades siguen acatando prácticas arraigadas en lugar de las leyes nacionales sobre matrimonio infantil y ocultan los matrimonios infantiles a las autoridades. Sigue habiendo una falta de concienciación sobre el impacto perjudicial del matrimonio infantil en las niñas.

● Normas de género: Muchas familias ven el matrimonio infantil como un mecanismo de protección para sus hijas que las protegerá de la violencia y reducirá sus gastos domésticos al garantizar que otra familia pueda mantener a su hija.

● Embarazo en la adolescencia: 1 de cada 4 mujeres(27%) en Costa de Marfil tuvo su primer hijo antes de los 18 años. Los embarazos se ven agravados por una educación sexual y reproductiva inadecuada. Muchas niñas se ven obligadas a casarse cuando se quedan embarazadas.

Mutilación/ablación genital femenina: La A/MGF está muy extendida en el noroeste de Costa de Marfil. La presión para casarse joven también se ve favorecida por la práctica de la mutilación/ablación genital femenina, ya que las familias creen que mejorará las posibilidades de matrimonio de las niñas.

COVID-19: La pandemia de COVID-19 ha tenido un impacto significativo en algunos de los hogares más pobres y ha exacerbado la vulnerabilidad de los niños. La pandemia expuso a las familias vulnerables a la pérdida de ingresos económicos, sumiéndolas aún más en la pobreza y la exclusión. En abril de 2020, una encuesta indicó que se había producido una disminución de los ingresos del 71% y que las familias no podían hacer frente a sus gastos básicos. El aumento de los niveles de pobreza y la grave inseguridad alimentaria expusieron aún más a las familias vulnerables al matrimonio infantil y a la violencia sexual y de género.

Costa de Marfil se ha comprometido a poner fin al matrimonio infantil, precoz y forzado para 2030, de acuerdo con la meta 5.3 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.

El gobierno no ha presentado una Revisión Nacional Voluntaria en ningún Foro Político de Alto Nivel.

Costa de Marfil copatrocinó las resoluciones de la Asamblea General de la ONU de 2016, 2020 y 2022 sobre el matrimonio infantil, precoz y forzado, y las resoluciones del Consejo de Derechos Humanos de 2013 y 2015 sobre el matrimonio infantil, precoz y forzado. En 2014, Costa de Marfil firmó una declaración conjunta en el Consejo de Derechos Humanos pidiendo una resolución sobre el matrimonio infantil.

Costa de Marfil ratificó la Convención sobre los Derechos del Niño en 1991, que el Comité de los Derechos del Niño ha interpretado para recomendar el establecimiento de una edad mínima para contraer matrimonio de 18 años, y la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (CEDAW) en 1995, que obliga a los Estados a garantizar el libre y pleno consentimiento para contraer matrimonio.

En 2019, el Comité de la CEDAW expresó su preocupación por la prevalencia del matrimonio infantil y la falta de aplicación del plan de acción nacional sobre el matrimonio infantil. Recomendó a Costa de Marfil que eliminara las excepciones a la edad mínima para contraer matrimonio, sensibilizara a la población y asignara recursos suficientes para aplicar medidas de prevención del matrimonio infantil y de protección de las víctimas.

En 2019, el Comité de la ONU sobre los Derechos del Niño expresó su preocupación por el limitado alcance geográfico de las medidas contra el matrimonio infantil y la escasa información sobre los planes de protección disponibles para los menores, en particular las niñas, que son víctimas o corren el riesgo de contraer matrimonio infantil. El Comité instó a Costa de Marfil a acelerar la adopción del proyecto de ley sobre el matrimonio para eliminar todas las excepciones que permiten el matrimonio infantil y a tomar medidas activas para poner fin a esta práctica.

Ambos comités pidieron medidas para proteger a los defensores de los derechos de las mujeres y los niños, incluidos los que abogan contra el matrimonio infantil, que son objeto de intimidación, acoso y amenazas.

Durante su Examen Periódico Universal de 2014, se expresó preocupación por la falta de atención prestada a la persistencia del matrimonio forzado. Costa de Marfil apoyó las recomendaciones de aumentar las medidas específicas e integrales para eliminar el matrimonio infantil, incluso a través de la educación. Durante su Examen Periódico Universal de 2019, Costa de Marfil apoyó las recomendaciones de intensificar los esfuerzos para prevenir y combatir todas las prácticas nocivas contra las mujeres y las niñas, incluido el matrimonio infantil, precoz y forzado.

En diciembre de 2017, Costa de Marfil lanzó la Campaña de la Unión Africana para Acabar con el Matrimonio Infantil.

En 2002, Costa de Marfil ratificó la Carta Africana sobre los Derechos y el Bienestar del Niño, incluido el artículo 21 relativo a la prohibición del matrimonio infantil. En 2011, Costa de Marfil ratificó el Protocolo de la Carta Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos sobre los Derechos de la Mujer en África, incluido el artículo 6, que fija en 18 años la edad mínima para contraer matrimonio.

Como miembro de la Comunidad Económica de los Estados de África Occidental (CEDEAO), Costa de Marfil adoptó en 2017 el Marco Estratégico para el Fortalecimiento de los Sistemas Nacionales de Protección de la Infancia, en virtud del cual proteger a los niños del matrimonio es una prioridad. En junio de 2019, los Jefes de Estado de la CEDEAO aprobaron la Política y el Plan de Acción Estratégico para la Infancia de la CEDEAO y la Hoja de ruta 2019-2030 sobre prevención y respuesta al matrimonio infantil.

Además, en julio de 2019, las Primeras Damas de la CEDEAO firmaron la "Declaración de Niamey: Llamamiento para poner fin al matrimonio infantil y promover la educación y el empoderamiento de las niñas", instando a los Estados miembros a iniciar reformas legislativas, institucionales y presupuestarias para aplicar la Hoja de ruta.

En 2019, en la Cumbre de Nairobi sobre la CIPD25, Costa de Marfil se comprometió a reducir la tasa de matrimonio infantil al 15% en 2030.

Costa de Marfil es un país pionero de la Alianza Mundial para Acabar con la Violencia Contra los Niños y un país socio de la Alianza Mundial por la Educación (AME ).

En lugar de tratarse como una cuestión específica dentro de la política gubernamental, el matrimonio infantil se incluye bajo el paraguas de la violencia de género.

El Ministerio de la Mujer, Bienestar Infantil y Solidaridad creó una Unidad de Género para garantizar que se tiene en cuenta el género en todos los programas, políticas y prácticas.

Desde la pandemia de COVID-19, el gobierno ha puesto en marcha varias políticas para abordar la violencia de género, entre ellas el establecimiento de una línea telefónica directa para supervivientes de la violencia de género, un plan de respuesta sanitaria y campañas de sensibilización en los medios de comunicación.

En 2020, el gobierno puso en marcha un programa nacional de aprendizaje a distancia que permitió a profesores y ancianos de la comunidad hacer un seguimiento de los estudiantes en riesgo de matrimonio infantil, embarazo adolescente o violencia durante la pandemia.

En 2020, el gobierno adoptó la Política de Género en la Educación y el Plan de Acción para promover la igualdad de género, y garantizar que las niñas permanezcan en la educación mediante la construcción de escuelas en las zonas que tienen una alta prevalencia de matrimonio infantil.

Entre 2013 y 2015, el gobierno creó un plan para acelerar la lucha contra el matrimonio infantil y el embarazo en la adolescencia. El plan incluía la participación de líderes comunitarios y religiosos en Abiyán, Man y Bondoukou para aumentar la sensibilidad hacia el problema. El presidente Alassane Ouattara apoyó la iniciativa y planeó financiar una campaña en los medios de comunicación para animar a las mujeres a participar en la política y la promoción. Sin embargo, el plan aún no se ha puesto en marcha por falta de recursos y presupuesto.

La mayoría de los casos de matrimonio infantil son tratados por un "Centre Social", que trabaja con las familias para identificar soluciones y gestionar los casos. Suelen coordinarse con los "Centres d'acceuil" (centros de acogida) locales, que prestan diversos servicios, como guarderías, vacunaciones, cursos de nutrición y servicios sanitarios.

En 2014, una sentencia sin precedentes condenó a un padre a un año de prisión por intentar casar a su hija de 11 años. También se le impuso una multa equivalente a seis meses del salario mínimo del país.

En los últimos años, la Embajada de Canadá en Costa de Marfil ha colaborado con la Réseau Ivorien pour la Défense des Droits de l'Enfant et de la Femme (RIDDEF), una ONG local, para sensibilizar a las comunidades y movilizar a sus miembros, líderes religiosos, profesores y padres para cuestionar actitudes y creencias y poner fin al matrimonio infantil.

En marzo de 2019, el Consejo de Ministros de Costa de Marfil aprobó un proyecto de ley para modificar la Ley del Matrimonio, de 1983, que fija la edad mínima de consentimiento para contraer matrimonio en 18 años, tanto para las niñas como para los niños, y elimina las dispensas especiales a la edad mínima para contraer matrimonio. Esta enmienda ha sido presentada al Parlamento, aprobada y convertida en ley tras su promulgación por el Presidente.