Jennifer Buffett de la Fundación NoVo escribe para el Huffington Post .
En la Fundación NoVo , sabemos que dar prioridad a las niñas y a las mujeres es uno de los métodos más importantes para cambiar nuestro mundo para mejorarlo. Hemos aprendido que ayudar a las niñas y mujeres a ayudarse a sí mismas eleva los estándares de vida de todos.
Cada año que una niña se queda en la escuela aumenta su ingreso futuro en un 10 a 20 por ciento. Y dado que es probable que las niñas y las mujeres inviertan el 90 por ciento de sus ingresos en sus familias, a diferencia del 30 al 40 por ciento de los hombres, la educación y el empoderamiento de las niñas y las mujeres tiene un impacto que se extiende en toda la sociedad.
Entonces, lo que les sucede a las niñas al principio de su vida hace una gran diferencia. En un viaje de aprendizaje a Etiopía, donde el 49% de las niñas se casan antes de cumplir los 18, me enfrenté a uno de los mayores desafíos que frena a la población femenina del mundo y mantiene a los países sumidos en la pobreza: el matrimonio infantil.
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