Preguntas y respuestas con Anne Gallagher, presidenta entrante de la Junta Directiva
1. ¿Por qué decidiste integrarte a Girls Not Brides: La Alianza Global para Terminar con el Matrimonio Infantil como la nueva presidenta de la Junta Directiva?
Me siento muy honrada y conmovida de haber sido invitada a dirigir Girls Not Brides como presidenta de la Junta Directiva. Para mí, esta organización es el modelo a seguir al pensar en la manera de abordar cuestiones sociales complejas. Su enfoque integral resuena con mi propio aprendizaje y crecimiento. A lo largo de más de tres décadas de trabajo en el ámbito de los derechos humanos, la justicia y la igualdad, he comprendido que un marco jurídico sólido es esencial, pero no suficiente. La incidencia política es igual de importante, pero no puede ser el único objetivo. El apoyo y la asistencia a las personas y comunidades que se encuentran en situación de marginación es un pilar fundamental en cualquier respuesta, pero no puede asumir toda la carga. Tal y como Girls Not Brides ha mostrado, es preciso integrar todos estos aspectos. Es necesario que las personas y las organizaciones se unan para alcanzar un objetivo común. La colaboración y el entendimiento son esenciales para superar incluso las divisiones más profundas.
Otro tema que me parece sumamente atractivo es el de los matrimonios y las uniones infantiles, tempranas y forzadas (MUITF). He trabajado en muchos ámbitos de los derechos humanos, desde la justicia penal hasta la trata de personas; desde los derechos reproductivos hasta la protección de las personas refugiadas. Todos ellos son fundamentales, y continuaré haciendo lo que esté en mis manos para marcar la diferencia. Pero los MUITF son un tema aparte. Abordar los matrimonios y las uniones infantiles, tempranas y forzadas es un objetivos que puede ¾y debe¾ ser compartido por todas las personas.
Alcanzar ese objetivo será un verdadero indicador del progreso de la humanidad. Será una señal clara de que hemos dado un giro, de que hay motivos para confiar en que avanzamos hacia un mundo más amable, más justo y más igualitario.
2. ¿Cuál consideras que será el mayor reto para Girls Not Brides en los próximos cinco años?
Girls Not Brides comienza su segunda década en un momento de agitación e incertidumbre a nivel mundial. La desigualdad dentro de los países y entre ellos ha alcanzado niveles sin precedentes. Los problemas sociales son cada vez más complejos y se superan unos a otros. Hay una competencia feroz por la atención y los recursos, y tenemos razón al preocuparnos de que las personas en situación de mayor marginación queden excluidas.
El desafío inmediato es doble. En primer lugar, mantener el foco de atención en los MUITF, para garantizar que el tema siga siendo prioritario en la agenda política internacional, regional y nacional. Y, en segundo lugar, centrar nuestra atención en las personas más próximas a este problema: las niñas y adolescentes afectadas por los MUITF y las organizaciones de la membresía de Girls Not Brides que trabajan con y para ellas. Ellas son las que tienen el poder de lograr un cambio real y duradero. Debemos hacer todo lo posible para garantizar que reciban el apoyo que necesitan y merecen.
3. ¿Cuál consideras que es la mayor oportunidad?
Nuestra oportunidad reside en nuestra misión y en la trayectoria consolidada en los últimos diez años. El movimiento mundial es sólido y se transforma en una formidable fuerza de cambio. El secretariado de Girls Not Brides y las organizaciones de la membresía han demostrado ser capaces de adaptarse con rapidez a los cambios y de impulsarlos, sobre todo en el último año. Estoy segura de que Girls Not Brides está bien posicionada para afrontar y sortear con éxito las tormentas por las que atravesamos.
Pero no hay lugar para la autocomplacencia. Como presidenta de la Junta Directiva, quisiera que nos adentráramos de lleno en la tormenta, para afrontar y exponer las repercusiones que las crisis económicas y otros aspectos de la pandemia han tenido en materia de MUITF. Y esta es una organización que entiende muy bien la importancia del contexto: para abordar los MUITF también es necesario abordar algunas de las cuestiones más difíciles de nuestro tiempo, desde la discriminación de género hasta la enorme desigualdad económica que atenta contra las libertades más básicas y necesarias. Es necesario continuar con la integración de estos vínculos en nuestra forma de pensar y abordar los matrimonios y las uniones infantiles, tempranas y forzadas.
4. ¿Qué experiencias o aprendizajes deseas aportar de tu trabajo previo en los desafíos más complejos en materia de derechos humanos?
He llegado a la conclusión de que los derechos humanos son un asunto de poder. Se trata de reequilibrar el poder a favor de quienes no tienen suficiente, a favor de las personas y no del Estado, a favor de las mujeres y de la infancia, cuyo poder para vivir con dignidad y libertad se ve con demasiada frecuencia comprometido. La historia nos enseña que nadie cede el poder de buena gana. De ello se desprende que la batalla por los derechos humanos sea larga y encarnizada.
Esa primera lección se ve matizada por una segunda. Mi experiencia en la primera línea de los derechos humanos en todas las regiones del mundo me ha enseñado a creer en la posibilidad del cambio. Tal vez no sea rápido, pero llegará. Creo en el cambio porque he comprobado por mí misma que si nos interesa lo suficiente, y si tenemos la voluntad de mantenernos firmes, entonces es posible mover montañas. Creo, sin duda alguna, que terminaremos con el matrimonio infantil. Creo en un futuro en el que las niñas, adolescentes, jóvenes y mujeres sean valoradas como iguales a sus pares varones.
Mi tercera lección tiene que ver con la importancia de situar a la persona con la que se trabaja y para la que se trabaja en primer plano. Al trabajar en el ámbito de la trata de personas, comprendí que quienes habían sido víctimas de ésta sabían mejor que nadie lo que había que hacer. No escucharles era un camino seguro hacia políticas erróneas, daños involuntarios y respuestas ineficaces. En este contexto, para mí resulta evidente que las niñas y adolescentes unidas y las que están en riesgo de unirse son las fuentes más valiosas de información y conocimiento, y que ellas mismas pueden ser agentes de cambio poderosas. No debemos perderlas de vista en ningún momento. Debemos verificar de forma constante nuestros instintos, acciones y decisiones y preguntarnos si reflejan las necesidades y los mejores intereses de las niñas y adolescentes, si las empoderan para ejercer sus derechos y libertades.
5. ¿Cuál es tu visión personal para dirigir la Alianza a partir de lo que sabes en la actualidad?
Hace mucho tiempo que trabajo en temas relacionados con los MUITF y, durante la última década, he seguido de cerca la evolución de Girls Not Brides. Una de las cosas que me llamó la atención fue su carácter polifacético.
Se trata de una organización que ha definido la forma en que el mundo entiende y responde a los matrimonios y las uniones infantiles, tempranas y forzadas. ¡Todo un logro!
Al mismo tiempo, ha movilizado a más de 1500 organizaciones, creando una comunidad de apoyo – la Alianza global – que se ocupa de la importantísima tarea de cambiar la vida de las niñas y adolescentes.
He comprendido que ambos aspectos están interrelacionados y que ambos son esenciales para la misión de terminar con el matrimonio infantil. Nuestra fortaleza, nuestra legitimidad y nuestra eficacia residen en la Alianza Global. Nuestra labor de incidencia política a nivel mundial, regional y nacional debe estar conformada por – y reflejar – las experiencias de quienes mejor entienden el problema y lo que es necesario hacer para abordarlo. Nuestro trabajo colectivo debe estar guiado por las organizaciones de nuestra membresía. Debemos garantizar que nuestro enfoque, nuestras tácticas y nuestras estrategias coincidan con las ideas y la evidencia derivadas de su trabajo. Es nuestra Alianza la que garantizará que el movimiento más amplio para terminar con el matrimonio infantil mantenga los derechos e intereses de las niñas y adolescentes en primer plano.
La Junta Directiva de Girls Not Brides es fundamental para que la Alianza Global prospere. En la dirección de la Junta espero trabajar de forma conjunta para garantizar que la organización esté en la mejor posición posible para cumplir con su ambiciosa visión de conseguir un mundo sin matrimonios y uniones infantiles, tempranas y forzadas.
En el tiempo que has tardado en leer este artículo 84 niñas menores de 18 años se han casado
Cada año, 12 millones de niñas se casan antes de los 18 años.
Es decir, 23 niñas cada minuto.
Casi 1 cada 3 segundos.