Como miembros y socios del movimiento mundial para acabar con los matrimonios y las uniones infantiles, tempranas y forzadas, todos estamos comprometidos con la construcción de un mundo en el que todas las niñas y adolescentes puedan acceder a sus derechos y actuar según sus decisiones. Como tal, también somos responsables de garantizar que las niñas y adolescentes estén en el centro de nuestras comunicaciones, y de que el proceso de contar historias sea una fuente de poder.
La cuarta sesión de las sesiones de aprendizaje en línea de Girls Not Brides se centró en cómo comunicar con poder y responsabilidad en torno a los MUITF.
En esta sesión, compartimos información sobre:
- Los principios y las buenas prácticas en la comunicación ética
- Cómo es un proceso de comunicación ética, desde el punto de vista de una persona colaboradora
- Con qué herramientas se cuenta para poner en práctica estos principios
- Cuáles son los desafíos y las soluciones que otras organizaciones han encontrado a la hora de comunicar de forma responsable
Principales aportaciones
- La comunicación ética implica tener en cuenta las dinámicas de poder entre la persona colaboradora y la persona que recopila su historia.
- Las dinámicas de poder dependen de características personales — tales como el género, la racialización, la etnia, la casta o la edad — y de la forma en que éstas se valoran en cualquier interacción.
- La comunicación ética responde a las necesidades de las personas colaboradoras y debe:
- Poner al centro los derechos, la seguridad, la autonomía y la agencia de las personas colaboradoras
- Trabajar con las personas colaboradoras de forma horizontal y en los mismos términos.
- Dar prioridad al consentimiento y proponerlo como un diálogo continuo y en varias fases.
- Desafiar estereotipos y evitar narrativas demasiado simplificadas y deshumanizantes
- Orientación práctica y herramientas disponibles en los lineamientos de Girls Not Brides
Encontrarás la grabación de la sesión, presentaciones, notas, y recursos abajo.